(Oojo, en este post no hay acentos, enhes, ni signos de iniciales de admiracion o interrogacion... las desventajas de un teclado anglosajon!)
En un libro (La vida invisible)que estoy leyendo un personaje dice que cada ciudad tiene su secreto, y que la mision de cada viajero que la visita es descubrirlo.
Cuando llegue a Chicago (ayer por la tarde) me di cuenta de que me iba a ser dificil encontrar ese secreto. Y mas, revelarlo. No creo que tenga tiempo. Y el exacerbado entusiasmo que senti ayer me arrastro a la confusion. Pensando (no se bien como ni por que) que yo estaria aqui el viernes 22 (regreso el miercoles 20), inverti un par de horas en viajar al Wrigley Field para comprar boletos para el partido de los Cubs del viernes por la noche. Afortunadamente las taquillas llevaban cerradas una hora, y no tuve que pasar el mal rato de comprar boleto para un partido que en el mejor de los casos solo podria ver en TV.
De cualquier forma, el Wrigley Field (y el barrio que lo rodea), vale la pena el viaje en Metro. El Metro es otra gran cosa de Chicago. La mayor parte del mismo es mas bien un tren elevado, cuyas vias corren a la altura de los edificios que circundan la ciudad. Por esa razon, en no pocas ocasiones, uno puede ver mientras pasa escenas de lo mas intimas en los patios traseros de dichos edificios... gente colgando la ropa, algun chico tirando a una canasta de basquetbol, una senora mirando el tren pasar desde su mecedora... es fascinante que el Metro de Chicago no siempre se hunda en el asfalto, sino en muchas ocasiones salga a la superficie y en mas todavia la sobrepase.
Hoy fui al US Cellular Field (antes Comiskey Park) a ver el partido de las Medias Blancas contra los Marineros. Increible espectaculo. El estadio (enorme) se paralizo mientras se cantaba el himno nacional antes de iniciar el partido... y digo que se paralizo (literalmente) porque yo estaba en un pasillo y la gente dejo de caminar para mirar al campo, quitarse la gorra (quienes llevaban) y llevarse la mano al corazon para escuchar y cantar el himno. El partido en si mismo fue todo un espectaculo. A pesar de que el beisbol es un deporte "lento" uno no podia aburrirse: la gente estaba animada; hay cuatro pantallas gigantes; el sonido es sobresaliente y cada cambio de entrada se hace algo para llamar la atencion de la gente (un concurso, alguna broma, un comercial...). Y venden unos hotdogs de antologia. Me comi uno que llaman "Polish Sausage", que hacen con cebolla agria... delicioso!
Luego fui al mirador de la Torre Sears. Impresionante. Para que se den una idea: la torre tiene 110 pisos (60 mas que el WTC en Mexico). El mirador esta en el 103 y la vista, sobra decirlo, quita el aliento. Mi camara esta fallando, asi que me quede bastante rato para guardar ese recuerdo con suficiente nitidez.
Manana intentare ir a tres museos: el Art Institute of Chicago, que tiene una de las colecciones mas importantes del mundo (segun dice mi guia), el Museo de Ciencia Natural (donde esta 'Sue', el esqueleto de T-Rex mas completo que se ha encontrado y el Museo de Ciencias e Industria, en el que se presenta una exposicion de Gunther von Hagen que consiste en la "plastificacion" de los tejidos humanos (los cadaveres presentados se ven en posiciones naturales, solo que sin la piel que cubre todo: busquenle en la red, a mi me parece fascinante). Tambien buscare boletos para el partido del martes entre los Bulls y los Knicks. No voy con muchas esperanzas, porque los Bulls van bien en la temporada y la rivalidad con los Knicks es legendaria, pero intentare de todos modos. Y quiero ir a un par de librerias que vi hoy y que prometen mucho.
Dos notas mas (antes de que se me acabe el tiempo aca): en Chicago hay muchos mexicanos, muchisimos. Yo driria que si NY es de puertorriquenos y centroamericanos, Chicago es nuestra.
Y que bonita ciudad es esta. Hay arquitectura de la buena casi en cada esquina. Desde rascacielos hasta edificios iniciados en el siglo pasado. Y un parque (el Millenium Park) que diseno el que construyo el Guggenheim en Bilbao (no recuerdo su nombre ahora). Todo muy pero muy bonito (la palabra es trillada, pero es la unica que se me ocurre para describir la ciudad!).
El clima un poco raro: por la manana y hasta mediodia, hace calorcito (como de 20 grados o mas), pero hacia la tarde y noche se suelta el viento que da sobrenombre a la ciudad y enfria todo a menos de 10 grados (calculo). Raro, pero yo soy feliz con mi chamarra de Indiana Jones, que me quito y pongo segun las condiciones.
Me voy ya, porque el Internet aca es carisimo (20 centavos de dolar el minuto).
No se si postee manana, porque no he encontrado lugares con servicio de Internet fuera del hotel. Y aqui ademas de caro es incomodo (la maquina esta junto al mostrador de recepcion: todos los que pasan ven que pagina tienes abierta, o que escribes).
Saludos del nuevo Lic, que es feliz aca en Chicago.