Hay siempre algo fascinante en el juego de espejos que es la estructura abismada, esa estrategia narrativa que desarrolla una acción en los límites de otra. No es fácil llevarla a cabo con eficacia, mucho menos con la maestría que Billy Wilder logró al dirigir Sunset Boulevard (1950).
Hay muchos espejos en los que se refleja la narración de un crimen a manos de una actriz en el Hollywood de mediados de siglo pasado. Está, por supuesto, el espejo del film noir; el de las películas románticas de amores imposibles; el de una historia del cine narrada desde el cine y, desde luego, la "verdadera historia" detrás de la película, con Gloria Swanson, la actriz principal que hace el rol de Norma Desmond, diva del cine mudo, siendo, en verdad, una veterana de Hollywood olvidada desde su fracaso en Queen Kelly, película de 1934 (muda, desde luego) dirigida por Erich von Stroheim, que en Sunset Boulevard hace de mayordomo de Desmond. En Sunset Blvd. hay incluso una escena memorable en la que se ven varios fotogramas de Queen Kelly: el cine dentro del cine.
Y ése es sólo uno de los muchos espejos que Sunset Boulevard ofrece para echarle un vistazo al mundo del cine en general y a Hollywood en particular. Hay referencias a guionistas ("sometimes is interesting to see just how bad bad writing can be"), actores (cameos de Buster Keaton, H.B. Warner y Anna Q. Nilsson), directores (Cecil B. DeMille, ni más ni menos), productores (que para una nueva película prefieren rentar el coche de una diva que contratar a la diva misma)...
Además, la anécdota que desencadena esas referencias es sobradamente buena (queremos saber cómo y porqué el personaje narrador aparece muerto -desde la primera escena- en la alberca de una casa en Sunset Boulevard), al igual que las actuaciones de Gloria Swanson, William Holden y Erich von Stroheim, sin pasar por alto la magnífica dirección -abundante en exquisitos detalles- a cargo de Billy Wilder.
Estimulante es el adjetivo que -se me ocurre- mejor define Sunset Boulevard. Es para tenerla en DVD y verla muchas, muchas veces.
(Calificación ergozoom: 90)
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