martes, julio 28, 2009

Miénteme

"Tú me alimentaste siempre de mentiraaas..."

Les paso el dato al costo. Hace dos semanas se estrenó en México la serie Lie to Me, protagonizada por Tim Roth. Se trata de un detective privado que resuelve sus casos con base en el lenguaje no verbal. Es presumido, quisquilloso, aborreciblemente inteligente y con un pasado oscuro como Michael Jackson antes de Thriller. Cualquier parecido con el Dr. House es, supongo, mera coincidencia.

He visto dos capítulos, y la serie promete. Coquetea con los errores de House, pero hasta ahora se ha salvado de caer en ellos. Se transmite todos los lunes a las 10pm por FOX, con repeticiones en distintos días y horarios.

¿Nos vamos al Mundial?

El domingo a la hora de la comida, a la hora de la final de la Copa Oro, estaba viendo algún episodio de la segunda temporada de la serie Bullshit, a la que puedo declararme adicto sin complejo de culpa (vi los trece capítulos en tres días...).

Mi padre y mi hermana estaban en la cocina viendo el partido y escuché los gritos de gol de mi carnala emocionada. Me dio gusto que México ganara, desde luego, pero no dejé de sentir desazón.


Es una teoría de vida que mantengo desde hace mucho: cuando lo que tienes es poco o nada, es fácil conformarse con
cualquier cosa. A mí me fastidia sobremanera la actitud de conformarse, de resignarse a tal o cual circunstancia porque no hay de otra.

Conozco a mi gente y preví un festejo en el Ángel. 4 mil personas. Algunos de los cuales (imbéciles, por decir lo menos) agredieron a varios turistas que "parecían gringos"... a uno le hicieron besar la bandera mexicana. Idiotas.

Más tarde me enteré de que el equipo al que le goleamos el domingo era la selección B de EU. Puros chavos fogueándose. Ni uno de ellos forma parte del equipo titular que llegó a la final de la Confederaciones hace un mes. ¡Ni uno!

Los titulares sí vienen el 12 a la eliminatoria en el Azteca. La Femexfut, en ese alarde de estrategia genial que tan bien se le da, programó el partido para las tres de la tarde (¿esperando que el calor, la contaminación, la altura y el estadio lleno suplan de algún modo las carencias del equipo mexicano en la cancha?).

Al Ángel teníamos que haber ido la semana pasada, cuando Paola Espinosa ganó medalla de oro en el campeonato mundial de clavados... repito en mayúsculas y entre signos de admiración: ¡CAMPEONATO MUNDIAL!... No hay razón de festejo tras derrotar a un equipo B en un torneo categoría D. ¡A otro perro con los retazos de esperanza que nos arrojan con los goles de Giovanni a Belinda!

El 12 de agosto sí veré el partido. La selección titular de EU, estoy seguro, no se amilanará ante el calor, la altura, la contaminación o la gente... ¿Tenemos nosotros más argumentos que ésos para que nos respeten en el Azteca? ¿O la Federación va a pedir que se suspenda el No Circula para asegurarse de que los gringos caigan como moscas?

lunes, julio 20, 2009

Man on the Moon

Pon una hoja tierna de la luna
debajo de tu almohada
y mirarás lo que quieras ver.

- Jaime Sabines

domingo, julio 19, 2009

Hasta pronto, profe

Hoy falleció Frank McCourt. Es célebre por su novela Las cenizas de Ángela (que no he leído; y cuya película tampoco he visto). Yo lo conozco por un libro suyo que leí a fines del año pasado: Teacher Man. Antes de ganar el Pulitzer en 1996 por su primera novela (a los 66 años), McCourt fue, durante décadas, profesor de literatura en varias preparatorias estadounidenses. El libro (editado en español por Norma en su sello "Verticales de bolsillo") es oro molido en manos de cualquier profesor. Se trata de una obra fascinante por honesta: no tiene reparos en mencionar los desencuentros de la profesión: "Los médicos, los abogados, los generales, los actores, la gente de la televisión y políticos son admirados y recompensados. No así los profesores. La enseñanza es la servidumbre de las profesiones. A los profesores se les dice que usen la puerta de servicio o entren por el fondo. Se los felicita por tener TETL (Todo Ese Tiempo Libre). Se habla de ellos con condescendencia y se les agradece con retroactividad cuando ya peinan canas".

Pero McCourt supo muy bien por qué hizo lo que hizo: dar clases en preparatoria durante 30 años de su vida. En el fondo se trata de "levantarse cada mañana, saltar alegremente de la cama sabiendo que tienes por delante un día en el que llevarás a cabo la tarea de Dios con los jóvenes estadounidenses, satisfecho con tu magra remuneración, ya que la verdadera recompensa es el resplandor de gratitud que ves en los ávidos ojos de tus alumnos cuando te llevan regalos de parte de sus padres, que te agradecen y admiran..."


Al final del libro el profe McCourt relata su encuentro con una profesora suplente que le pide algún consejo. Él le responde: "Busca lo que amas, y hazlo. A eso se reduce todo (...) Es difícil, pero tienes que lograr estar a gusto en el aula. Nunca sabras qué les has hecho a, o qué has hecho por, los cientos que vienen y van. Los ves salir del aula: soñadores, insulsos, despectivos, maravillados, sonrientes, perplejos. Después de unos años desarrollas antenas. Sabes cuándo llegaste hasta ellos, cuándo te los pusiste en contra. Es química. Es psicología. Es instinto animal. Estás con los chicos y, mientras quieras seguir siendo profesor, no hay escape. Eres tú y los chicos. Bueno, suena el timbre. Te veo luego. Busca lo que amas, y hazlo".

viernes, julio 17, 2009

Stand By Me (revisited)

Una nueva versión de "Stand By Me". La vi esta noche en Milenio TV. Me parece que es de un documental. Como sea, la versión es refrescante. Extraordinaria. Pónganse los audífonos y súbanle todo.

martes, julio 14, 2009

¿Y el oro?

De la columna de David Fáitelson hoy en Milenio Diario:

"No puede una selección como la mexicana –que, les recuerdo, fue cabeza de serie en el último Mundial– medir sus alcances ante una selección que ni siquiera es reconocida por la FIFA y cuya extensión territorial apenas y supera los 800 kilómetros cuadrados. No se puede, no se vale, no funciona buscar aquí algún tipo de mejoría. Hay que ganar y ya".

Concuerdo.

Lean el texto completo dando click aquí.

lunes, julio 13, 2009

No puedo creer que esto EXISTA;

es...

Tierra Santa: La Experiencia


¡Y es real!

(a sólo 35 dólares la entrada)

Dos en cartelera

Religulous (Larry Charles, 2008)
[En México: ¿Reli... qué?]

Larry Charles es el director de Borat ("I arrived in America's airport with clothings, US dollars, and a jar of gypsy tears to protect me from AIDS"). En esta ocasión hace mancuerna con el comediante Bill Maher (quien también escribió el guión) para filmar un documental sobre la base de lo ridículo que resulta (o al menos parece) creer en Dios y, más específicamente, en alguna religión. No va muy a fondo en el asunto, pero sin duda funciona bien como disparador de la reflexión: "The only appropriate attitude for man to have about the big questions, is not the arrogant certitude that is the hallmark of religion, but doubt. Doubt is humble and that is what man needs to be, considering that human history is just a litany of getting shit dead wrong".

Happy-Go-Lucky (Mike Leigh, 2008)
[En México: La dulce vida]

Inusual comedia en la filmografía del director que nos entregó Vera Drake y Secretos y mentiras. Lo interesante de la película es la decisión de Poppy, su personaje principal, de vivir la vida con gusto. Hay demasiado pesar en el mundo, demasiados problemas y demasiada gente mala... y todas esas razones son más que suficientes para decidir que la vida ha de disfrutarse, que el mundo puede ser divertido. No es una decisión fácil; requiere madurez e inteligencia. Y muchas agallas. Poppy tiene todo eso, y algo más. De otro modo nos encontraríamos con la contraparte femenina de Forrest Gump, feliz únicamente por el "feliz" accidente de que su coeficiente intelectual le obliga a ver la vida con pueril inocencia. No es el caso de Poppy, afortunadamente.

domingo, julio 12, 2009

Nueva historia de la Cristiandad

"Comed y bebed todos de mí..."

Lo dijo el escritor inglés David Winner: "El fútbol está llenando el vacío cultural que ha dejado la religión". La idea no es nueva, y es seria. ¡Vaya que lo es! CR no ha jugado un partido con el Real Madrid y ya llenó el Bernabéu con miles de seguidores que han encomendado sus espíritus a un tipo que costó 1800 millones de pesos y ganará más de 27 mil pesos por hora. No fue la presentación de un jugador, sino una especie de santo que se elevó a los altares el pasado lunes en Madrid.

La palabra ya no será "amén" sino "gol". ¿Lo dudan? Chequen el texto de John Carlin publicado hoy en El País. Imperdible.

jueves, julio 09, 2009

Se viene Guadalupe

¿Qué pasó en Houston?

LO MALO: Tenemos un problema, desde luego, con un equipo que apenas gana a Nicaragua (135 del mundo) y empata con Panamá (65) en un tongo de antología.

LO PEOR: Ahora al Tri le tiemban las piernitas porque se encuentra ante la obligación (uuuuuyyyy) de ganar a la isla de Guadalupe (no encontré ese país en la lista de FIFA), que lleva dos victorias en dos partidos jugados.

LO FEO: Aguirre agrediendo a un jugador panameño en pleno partido. ¿Qué tan desesperado hay que estar para quebrantar el fair play en un torneo como éste ante un rival como ése? Culpan a los organizadores del torneo; al árbitro que no manejó bien el partido... Pero, ¿dónde está la clase, el estilo, la categoría del líder de un equipo que supuestamente aspira a ser grande? ¿O ya estamos en el nivel de los partidos moleros? "¡Nos vemos a la salida weee!"

Ahora contra Guadalupe. Que Dios nos agarre confesados.

martes, julio 07, 2009

Recuerdos de Michael

Buscando discos para re-cargar a mi iPod ayer encontré Dangerous (1991). No pude ni quise evitar recordar los momentos en los que me acompañaron algunas canciones de ese disco. Una canción definitoria de esos días fue "Black Or White". Recuerdo que me sorprendió sobremanera el principio de esa pieza (el niño escuchando música a altas horas de la noche y siendo regañado por su padre: incluso se escucha cómo introduce un cassette... ¡un cassette! a la grabadora) y luego el quiebre con el acorde de una guitarra que seguramente fue el más escuchado de esa década (hubo anuncios de Pepsi que se encargaron de reforzar ese estímulo). El Dangerous World Tour marcó, sin duda, un hito en la historia del negocio (el gigantismo de los escenarios de U2 no es, realmente, ninguna novedad).

"Will you be there" fue perturbadora. Inicia con lo que después supe es un fragmento del cuarto movimiento de la novena de Beethoven y termina casi seis minutos después con Michael llorando e implorando a alguien que se quede, que esté.

"Keep the Faith" es una canción plena de esperanza. "Don't let nobody turn you 'round, brother". Recuerdo haberla escuchado decenas de veces. Y no sé por qué la asocio con una de mis asistencias al Abierto Mexicano de Tenis (supongo que mi walk-man hizo lo suyo en ese momento).

Sin embargo, pese a estos recuerdos entrañables, y sin ser conocedor, Dangerous no me parece su mejor disco. Lo es, para mí, Thriller (1982). En él encuentro atisbos de genialidad. Recuerdo que cuando era niño me gustaba tirarme al piso y dar vueltas como creía que las daba MJ. Creo que también hacía el pasito de Moonwalker (sólo en fiestas familiares y afortunadamente siempre en la era pre YouTube). Mi padre bailaba con un guante y consiguió el video de "Thriller" en Betamax. Lo vi muchas veces con mis primos y hermana. Era verdaderamente aterrador (y fascinante) a los ojos de alguien que todavía no empezaba la primaria.

No tengo idea de si Michael Jackson era una buena persona. Tampoco sé si me importa. Estoy seguro de que la gente que lo rodeaba no lo es. Su mamá peleando el control de su herencia. La madre de dos de sus hijos declarando que nunca tuvo relaciones sexuales con él. El niño al que Jackson pagó 20 millones de dólares para evitar un juicio sobre pederastia confesando que Michael nunca lo tocó y que él (ahora un cabronazo millonario de 24 años) mintió todo el tiempo instigado por su padre...

Se fue. Hoy será enterrado. Espero no equivocarme al afirmar que en 20 ó 30 años Michael Jackson será recordado más por su música (ineludible referente de la cultura occidental de fines del siglo XX) que por el patetismo de una vida rodeada de tinieblas.