De pocas cosas me siento tan orgulloso.
Supongo que así se sienten los padres cuando un hijo se va: orgullosos y al mismo tiempo un poco tristes de ya no tenerlo en casa; seguros de haberle dado las armas suficientes para defenderse en el mundo real y, claro, dispuestos a ayudarlo cuando sea necesario, pero sin volver a asumir la responsabilidad total de su vida.
Ahora mi tesis deberá defenderse por sí misma ante sus lectores: un par de investigadores del Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM que la pondrán a prueba durante los próximos días para ver si así, solita, puede mantener su valía. Yo sé que lo hará. En marzo o abril estaré titulado.
5 comentarios:
FELICIDADES POR LO DE LA TESIS, DEBERA SERVIRTE SABER QUE TE ESPERA MUCHO, MUCHO MAS, Y FELIZ, AGRADECIDO Y DECIDIDO ES COMO LOGRARAS LA PLENITUD COMO SER HUMANO, DISFRUTA ESTE, UN MOMENTO DE PLENITUD QUE YA NADIE, NI DIOS TE QUITA CAMPEON !!!!!
Hombre, pues gracias por lo de campeón, pero en realidad me siento como en cuartos de final. Los partidos que siguen serán definitivos. Gracias, en verdad, y saludos.
LOS PEQUEÑOS PASOS SON TAN IMPORTANTES COMO LOS GRANDES, EL INICIO AVECES ES LO MAS COMPLICADO, NO TE SIENTAS EN CUARTOS DE FINAL, CADA LOGRO ES UNA BATALLA GANADA, UNO SABE CUANDO GANA UNA GUERRA AL TENER PAZ Y FELICIDAD COSAS NO TAN SIMPLES DE CONSUMAR EN UNO MISMO.
VENGA!!! FELICIDADES, DE NUEVO.
Pp: Me da mucho gusto saber que llegaste al final de una de tus tantas metas. De aquí en adelante, a cosechar éxitos.
Saludos y la mejor de las suertes.
Marissa
Marissa: Gracias por venir. Y por los buenos deseos. Saludos.
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