Cuenta el escritor Eduardo Galeano que un amigo suyo estaba impartiendo una conferencia en una universidad nortemericana. Terminada la exposición, un alumno le preguntó qué era la utopía. El amigo de Galeano lo explicó con una metáfora: "La utopía es como el horizonte, uno se acerca diez metros y él se aleja diez metros; avanzamos otros cien metros y él se aleja otros cien metros; volvemos a caminar mil metros y el horizonte siempre está a la misma distancia..."
Uno de los alumnos, con el sentido pragmático que caracteriza a los norteamericanos y que es tan bueno para algunas cosas, le dijo: "... Pero, entonces, la utopía no sirve para nada". El amigo de Galeano cerró la metáfora: "¿Cómo no?, sirve para caminar".
Uno de los alumnos, con el sentido pragmático que caracteriza a los norteamericanos y que es tan bueno para algunas cosas, le dijo: "... Pero, entonces, la utopía no sirve para nada". El amigo de Galeano cerró la metáfora: "¿Cómo no?, sirve para caminar".
Del libro Liderazgo, de Juan Mateo y Jorge Valdano (Taurus/Aguilar, 2000)
1 comentario:
Transcribí esta entrada tuya en un trabajo que entrego mañana sobre la utopía. Pero no caí en el plagio: cité tu blog y todo ;) Saludos por allá.
PD: De paso no pude evitar releer algunas otras entradas y confirmé dos cosas que ya sabía: cuánto aprendí contigo y cuánta admiración te tengo, en todos los sentidos.
Angie
Publicar un comentario